Mi Mundo sabe a Naranja: ¿Hay algo más aburrido que ser una princesa rosa?

Raquel Díaz R. ha ilustrado este magnifico cuento publicado por Editorial Thule. Con este libro trabajaremos con nuestros niños, la igualdad de oportunidades y la coeducació.

Cuando Violeta, una pequeña de cuatro años, dijo que quería ser una princesa de cuento la primera reacción de Raquel, su madre, fue de sorpresa: "¿Por qué quieres ser una princesa? Si sólo duermen y esperan aburridas de por vida a que llegue un príncipe, ¿no prefieres ser una princesa azul que cace piratas y dragones?". De esta tierna escena surge ¿Hay algo más aburrido que ser una princesa rosa? (Editorial Thule), un delicioso cuento ilustrado que se ha convertido en todo un fenómeno editorial reclamado por los educadores infantiles en muchas escuelas españolas -y a punto de publicarse en Francia- por los valores de "igualdad y coeducación" con los que se teje el relato.

Raquel Díaz Reguera, sevillana del 74, es la autora de la historia de Carlota, "una princesa rosa; con su vestido rosa, su armario lleno de ropa y una habitación con una cama, con unas sábanas y una almohada rosas", relata al inicio del libro. "A mi hija Violeta -dice- le encanta que todo sea rosa a pesar de que la he educado igual que a su hermano Pablo, de ocho años. Realmente, es muy difícil escapar a esta educación sexista que impregna todo", y que, durante décadas, siglos, "hemos tenido grabado a fuego en nuestras vidas".

A partir de la maternidad, la autora volcó su universo creativo, cultivado durante años en la composición musical [es autora de temas para Noa, Pasión Vega o Miguel Ríos, entre otros intérpretes] al sugerente mundo de la ilustración y el diseño, donde está recogiendo excelentes críticas. La literatura infantil, el terreno donde ha debutado con esta atípica historia de princesas sin príncipe, le ha "atrapado", confiesa, y en breve, llegará a las librerías Un amor tan grande (Imaginarium) y Un beso antes de desayunar (Lóguez), además de una colaboración con Paco Mir (Tricicle) para el cuento Azulín, azulado donde, de nuevo, plasmará su infinita curiosidad a través de bellísimas imágenes creadas a partir de la investigación con diferentes técnicas y texturas.

¿Y tu de que vestirias a Carlota? A continuación la autora nos deja una imagen en blanco y negro para proponer en nuestras aulas o desde casa a nuestros hijos la idea de que ellos sean los que vistan a la protagonista del cuento.