Manipular y amasar constituye una de las actividades mas divertidas para un niño, siendo la arena un elemento magnifico en este sentido.
Es un material que resulta agradable al tacto y se desliza entre los dedos, además de tener la cualidad de poder transformarse. En función de si está seca o húmeda, más o menos diluida, la arena permite desarrollar d¡ferentes actividades para cada tipo de edad.
SIENTO, TOCO, DESCUBRO...
No es hasta los doce meses cuando el pequeño no puede apreciar la arena como un instrumento de juego.
Vamos a necesitar arena y agua en el aire libre, y la ayuda de la mami o el papi.
El juego se basa en las distintas sensaciones que transmite la arena (seca y mojada):
Se desliza, se escapa, resbala de la mano cuando el puño se cierra, en cambio si se humedece, se adhiere entre los dedos como si de pegamento se tratase.
Si mojamos con más agua, se vuelve muy blandita.
Para variar un poco, podemos experimentar en casa además con pintura de dedos y la arena, y os aseguro de que el pequeño disfrutará más de esta experiencia.
El objetivo que se persigue con esta actividad es estimular la observación y el sentido del tacto, además de experimentar, a nivel intuitivo, el concepto de consistencia.
VERTER Y MEZCLAR (Entre los 12 y 18 meses)
Necesitaremos arena, agua, recipientes de distintos tamaños, tamiz y diferentes utensilios como palas, cucharas...etc al aire libre y la ayuda de mamá o papá.
Elegiremos recipientes de materiales, formas y tamaños distintos, podremos entonces:
Introducir la arena en un recipiente y luego la volcaremos.
Transvasar de una botella a un vaso o cubo mas pequeño, veremos que ocurre al verter de un recipiente grande a uno pequeño y viceversa.
Filtrar a través de un tamiz o un colador.
Llenar un recipiente con arena y otro con agua, para luego vaciarlos, y asi se verá la diferencia que hay, e incluso la arena la vaciaremos en el repiente con agua...
Es aconsejable dejar al niño todo el tiempo necesario para probar y probar, antes de ponerle un estímulo distinto.
El objetivo que se persigue es afinar las dotes de observación, desarrollar la manualidad, estimular la percepción de materiales distintos y experimentar a nivel intuitivo, el concepto de cantidad.
TRAS LAS HUELLAS DE LA IDENTIDAD ( A partir de 2 años)
Para estas actividades entrarán en escena además de la arena, uno o mas participantes en la orilla del mar.
Dejaremos las huellas del pie, de la mano, del culete... sobre la arena húmeda, además de poder imprimir huellas cercanas como las de un adulto u otro niño, e incluso jugaremos a buscar otras como las de un animal (perro, gaviota...).
Es importante reforzar el sentido de identidad del niño ("esa huella del pié es mía") y experimentar , a nivel intuitivo, el concepto de tamaño.
UN JARDÍN QUE CRECE CON ÉL ( A partir de los 3 años)
Para este juego necesitaremos una bandeja, arena, varios objetos como coches, piedras, animalitos... y podremos jugar en casa o en el aire libre.
Llenamos la bandeja de arena para a continuación pedir al niño que construya un paisaje con la ayuda de los objetos que tenemos a mano. Podrá dejarse en un rincón de la casa para que el niño pueda modificarlo cada vez que quiera.
Intentando alcanzar el objetivo de estimular la creatividad y ofrecer la posibilidad de representar emociones y sensaciones, así como a aprender a cuidar su propio espacio.
FORMAS Y CASTILLOS ( A partir de 4 años)
Se necesitarán moldes de diferentes formas, palas y rastrillos, recipientes... y podrán jugar uno o varios niños en la playa.
A partir de esta edad el niño ya ha desarrollado ciertas capacidades que le permiten realizar una serie de actividades más complejas, como la construcción de un castillo.
Para ello es necesario llenar el recipiente con arena húmeda, dandole una consistencia adecuada. Después habrá que compactar y nivelar la superficie, darle la vuelta rápidamente para no verter parte del contenido y retirar el molde con cuidado.
Asimismo la realización de trampas, cavando hoyos en la arena constituye una actividad muy atrayente para este rango de edad y les permite a su vez medir su capacidad de manipulación y de transformacion de la realidad.
Así ayudaremos a poner en práctica una estrategia para la realización de un proyecto, conseguir un resultado gracias a su habilidad manual y descubrir su capacidad para dar forma a un material que no la tiene.
DISTINTOS TIPOS DE ARENA ( A partir de 5 años)
Además de necesitar arena, aqui entra en juego el ambiente arenoso: playa, rio, lago...etc ya que son ideales una vez que el niño crece y podrá descubrir muchos tipos de arena. Hay que hacerle descubrir las sensaciones cambiantes relacionadas con el color y la composicion de los distintos tipos de arena, así como su temperatura (en función del sol).
El objetivo a seguir es estimular la observación de la naturaleza y el conocimiento de los diferentes ambientes que nos rodean.
Fuente: Revista Mi bebé y yo